El Blog de Marco Polo Pérez Xochipa

sábado, 29 de diciembre de 2007

Dios te salve Sabina

La frustración de este año que se va fue no haber asistido a su concierto, así que en el mismo momento que él junto con Serrat cimbraban el Complejo cultural S.XXI, yo estaba en un bar del centro con una cerveza, escuchando 19 días y 500 noches de un trovador que se defendía con su buen sentido del humor.
Recordaba cuando años atrás escuche esta línea de Sabina: "...¿ahora donde iré con un alacrán en lugar de corazón?..." entonces supe realmente a que se refería, ahí fue cuando todas esas preguntas que me había hecho acerca de todo Sabina las respondía con una sola canción, o mejor dicho, sólo en pequeñas partes, que después juntando podían perfectamente ser parte de una conversación.
Yo también me siento tan joven y tan viejo, y definitivamente al escoger una vida también elijo la del pirata cojo con pata de palo, con parche en el ojo, con cara de malo. Yo tampoco quiero un amor civilizado, yo también deseo que todas las noches sean noches de boda y que el espejo no me de la razón. De la misma manera que a Sabina, México me atormenta y Buenos aires me mata; comparto con él la sensación que le dejó Maruja, cuando a mi también me dejaron por un idiota, del que después yo me hice amigo cuando a él también lo dejaron por otro idiota, pero eso si, que hermosa era...
¿Quién no ha estado cerrado por derribo? Fue Sabina el que justificó el engaño que puedo llegar a hacer cuando me empiecen a querer como se quiere a un gato, con sus letras me quedó claro que todas mis amantes tenían razón en eso de que antes el malo era yo.
Todas las respuestas, no poéticas, no románticas, no condescendientes, no rosas, sino las respuestas que elegante y diplomáticamente me hacía decirles a todas ellas que si bien no eran las más guapas del mundo, sí eran más guapas que cualquiera.

Y como dice en su mensaje de año nuevo: "Lo mejor de la vida pasará mañana". A mi me dejó un sentimiento de complicidad, ese que me hizo sentir acompañado cuando también me abandonaron como se abandonan a los zapatos viejos, cuando una mañana regresé a la maldición del cajón sin su ropa, a la perdición de los bares de copas, a las cenicientas de saldo y esquina; cuando me fui volviendo loco, y cuando derrochando la bolsa y la vida la fui poco a poco dando por perdida.
Joaquín sonó esa misma noche en la que ella se fue, es por eso que también este año que termina fue el de los 19 días (los de ella) y de las 500 noches, (las mías) en la que ella se volvió en esa mujer, la de la frente muy alta, la lengua muy larga y la falda muy corta.

Yo también deseo como él escribir la canción más hermosa del mundo, y mientras eso ocurra seguiré enamorado de Soledad, de Esperanza y de Inmaculada.

Este pez ya no muere por tu boca
Este loco se va con otra loca
Estos ojos no lloran más por ti
Dios te salve Sabina, lleno eres de gracia.

Mi Annie Hall, mi Gioconda, mi Wendy, las damas primero

No considero coincidencia que Woody Allen haya hecho Annie Hall (que aquí se presentó con el ridículo título de "Dos extraños amantes") en el mismo año en que nací, 1977. Y hoy 30 años después que la veo me atrapa con el sólo monologo del principio, mostrándome que cada quien tiene su Annie Hall en terapia que irrumpe intensa y súbitamente y nos vuelve locos para después irse, que todos sacamos a ese comediante neurótico que de alguna manera nos hace llevadera la vida, con una Allison previa siempre en nuestras relaciones y que en ocasiones nos hace preguntarnos ¿porque abandonamos?.
La vida debería ser como la maneja Alvy, viéndola y recreándola por partes para su análisis irónico, (igual que como lo hace Malcom) con relaciones que inician y terminan y vuelven a iniciar y vuelven a terminar, cuando uno quiere y el otro no y viceversa, tan parecidas ahora como lo eran cuando yo nací, por ahí de 1977.

Yo tampoco quisiera pertenecer a algún club que me aceptara a mi como miembro, ahora concuerdo con Sabina, "Mi Annie Hall, mi Gioconda, mi Wendy, las damas primero"
Sigue "Muero por ti", otra joya de Allen donde también me veo reflejado.

viernes, 28 de diciembre de 2007

Día de los inocentes desde el pozo

28 de diciembre de 2007, día de los inocentes, que raro comenzar a escribir en un día como este, hoy que lo que se dice no es en serio, hoy que puedes equivocarte y mentir y pedir y no regresar, hoy, precisamente hoy que nadie confía en nadie.

De niño me asomaba al pozo de la casa de mi abuela, sabía que no debía, que corría peligro, pero aún así lo hacía, aún así me las arreglaba para ver en el fondo mi reflejo en el agua que se alcanzaba a ver cuando su nivel me lo permitía. Mi sentimiento era una mezcla entre miedo y alivio, de alivio por el hecho de no estar en el fondo, de no estar perdido en esa oscuridad de la que estaba seguro no podría salir de haber caído. Después me alejaba a asomarme a otros lados, a disfrutar de mi libertad de estar afuera, sabiendo que en algún otro momento regresaría a asomarme de nuevo.
Hoy el sentimiento es parecido, hoy vuelvo a ser ese niño que se asoma a un pozo para ver su reflejo, pero la diferencia es que ahora mi alegría puede ser mayor por el hecho de que ya estuve ahí adentro y logré salir. No me da miedo asomarme, no me da miedo resbalar y caer, no me da miedo nada de eso, ahora me río un rato, introspectivamente trato de ver el reflejo de mis ojos, me vuelvo a reír, me regocijo un rato y me vuelvo a ir. Lo que siento es una enorme tranquilidad, como esa que trate de describir con los pingüinos, ahora es más tangible, ahora es mucho el aire que estoy por respirar.
Despacio camino por el borde del pozo, aún no puedo creer que yo haya estado ahí dentro, aún me cuesta verme en el fondo, pesando que nunca iba podido salir, pero salí, o por lo menos saqué mi cabeza los suficiente para respirar, no se, pero estoy saliendo, lo sé, lo sé.

¿Que estarás haciendo tu?

miércoles, 26 de diciembre de 2007

El Tlon ha aterrizado

Definitivamente el Hi5 no sirve más que para publicar fotografías y ligar (una de esas dos cosas me ha salido muy bien) Es por eso que gracias a la Sociedad de Narradores Vivos, que yo prefiero llamar "Escribanos obsesivos compulsivos" (o algunos repulsivos) he venido a dar aquí, a mandar estas letras al ciberespacio, a ver si alguien se tropieza con ellas.
Siempre he creído que la única forma real de sanación es la palabra, lo demás, son solo intentos para llegar al final a lo ya mencionado, a la bendita palabra.